
Siete personas permanecían hospitalizadas en condición estable, mientras que el número de heridos aumentó a casi 80, según informó la Policía de Merseyside. Esta cifra casi se ha duplicado desde el lunes, tras conocerse nuevos heridos.
La ciudad estaba celebrando el vigésimo título récord del Liverpool cuando el conductor giró por una calle que estaba cerrada al tráfico y se estrelló contra un mar de fanáticos, transformando un día de alegría en una catástrofe.
La policía afirmó que el hombre británico de 53 años detenido también es sospechoso de estar bajo los efectos de drogas y conducir de forma peligrosa. Creen que evitó un control de carretera siguiendo a una ambulancia que se dirigía a toda prisa para atender a una persona con un presunto infarto.
El conductor no ha sido identificado, lo que es típico en Gran Bretaña cuando un sospechoso no ha sido acusado de ningún delito.
La policía tuvo que obtener una extensión para retener al hombre por más de 48 horas y tendrá que acusarlo de un delito antes del jueves por la noche o dejarlo en libertad.
(Foto AP/Jon Super)